Hay como pena en el aire,
al menos eso me pasa a mí cada primer Lunes del año,
tal vez sea el cansancio del año entero que cargamos sobre las espaldas,
tal vez sea el corto fin de semana que tuvimos para digerir este cambio de folio o tal vez sea eso, tal vez de verdad sea pena,
pena de sentir que en cada día, en cada año se nos va un poco la vida,
la incertidumbre de sostener con el cuerpo que tenemos,
con la fuerza que tenemos, con el ánimo que tenemos, la vida misma que no nos deja estancarnos, que nos obliga a avanzar y hacer las cosas bien,
y no de otra forma, siempre bien , sin dañar, sin flaquear, sin hacer infelices al resto,
parece sencillo, pero no todos lo logramos.
Alguien me decía por ahí: “Me parece curioso celebrar un giro más de la tierra, una nueva vuelta de 365 días” .
Y si, puede parecer curioso al reparar solo en las cifras, pero no hay que olvidar que las cifras son solo indicadores y que por si solas no nos sirven y prefiero pensar en que lo que celebro no es nada más ni nada menos que la renovación de las fuerzas, de las esperanzas y del cariño de la gente y no una translación anunciada.
Y aquí estamos de nuevo, comenzando un nuevo Enero, como una hoja en blanco de un libro donde está todo por escribirse, con el recuerdo fresco de lo que acaba de marchar y con ese susto en la guata de lo que está por venir, de lo que va a ser, de no cometer los mismos errores, de avanzar y no retroceder, sin embargo suele pasarnos que al llegar Diciembre hemos vuelto a repetirlo todo, pero es así, al menos nos amanecemos esperanzados este primer Lunes, y eso es lo bueno.
La noche de año nuevo mi hermana, que anda de lo más mística, hizo una ronda entre todos de manera que cada uno pudiera contar lo mejor y lo peor del año que se iba, era una noche de fiesta en que la alegría era lo que reinaba, sin embargo el repaso de los errores, de las fatalidades, de los aciertos y las alegrías nos llenó de esa pena que hasta hoy siento.
Pero como siempre, como cada año, se me pasa ligerito conforme van avanzando los días,
y me va llenando de energía el mundo que se me planta por delante, y las ganas de ir completando minuto a minuto con más de lo bueno que de lo mano este libro abierto que se me presenta cada año donde escribo más derecho que torcido los renglones prodigiosos de esta nueva, radiante y completa hoja en blanco.
lunes, enero 02, 2006
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9 comentarios:
Vamos con todas las ganas amiga kiantei, que esto que se viene sea fructifero.
Saludos
1°
mira que esa sensación de hoja en blanco siempre me parece sorpendente
y me pregunto si es sugestión social o si realmente todo reinicia
porque si te fijas el 31 de diciembre es un pequeño hoyo
y luego, todo está igual
por lo menso celebramos en grande :)
la ronda que hicieron me parece buena, y complicada
hablar en publico lo que te dirías sólo a ti...
abrazos, nos vemos
Lo pasado pisado, dicen. Aunque hayan quedado algunos vestigios de las penas y penitas, será cuestión de ponerlas en una bolsa y tirarlas al río, o a cualquier parte. Que empieces con el pié derecho. Abrazos.
Mi querida Kiantei,
Que este año le traiga mucha inspiración y asi nos llena de colores y aventuras, esas páginas en blanco de hoy.
un fuerte abrazo con todo mi cariño
Minimo, una referencia al ultimo capitulo de nip tuck, toy esperando...lloré por adrian.
Puta toda la razón.
Perate que me inspire.
la ronda esa estubo notable, me falto agradecercelo a gloss coehlo.
aproveche de botar tensiones y desganas.
hasta que me torcí el cuello, que gracioso, empezar el año torcido.
Hay ciertos augurios que prefiero no sean tan realidad.
Te inspiraste?
con lo de cara de pizza o solo viste una piedra???
jaja
son bromas, you know.
bromas blog.
Eres tan dulce Candy... me pasa lo mismo, al principio ando medio depre pero con los días se me pasa... un abrazo mi ninha...
yo tb he andado en borrador empezando el año.
uno deberia comenzar yéndose de vacaciones...
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