lunes, diciembre 28, 2009

Fin de ruta


Y me paro ahi en la puerta del Mentecato ese, (uno de varios que intento dejar y no, no se puede)
Y yo pensando en lo bueno que sería poner un candado y decir por ejemplo:
"Bueno, soy muy amiga de poner candados, de finalizar, de despedirme y dejar este sitio así, tal cual, con sus brillitos jugando a dar mensaje en el side bar y la crónica de un castor que mira en silencio el camino recorrido"
Ya he dicho todo lo que pienso, pienso.
Ya he escrito todo lo que he querido, pienso todavía,
ya he soñado, ya he jugado, ya he herido, ya he aprendido, ya me he divertido, ya he optado, ya no te necesito Casa del castor.
Y cuando decido pasarme una vez más este 28 de Diciembre por esos cuatro últimos blogs que dejé en el bloglines me sacude el cartel de mi brujo payaso que reza:
 "Que la magia continúe, Dónde? En cualquier lugar. En ustedes. Siempre"
Y el candado se me oxida entre los dedos.
Pues magia es la que me corroe y corrompe y me inclina a las coincidencias y a los desginios.
No puedo todavía.
Seguro lo haré.
Pero ya no será esta tarde.
Un beso a todos los que pasan de vez en cuando por este rincón remoto a dejarme sus sabores de mareas.
Feliz año 2010.