viernes, marzo 28, 2008

La Efímera Vulgata

Por años sobrevoló en mis nostalgias la historia esa de la Efímera Vulgata.
La encontré un día de mis primeros tiempos de adolescencia brillando en papel couché en una revista luminosa de esas que mezclan arte y farándula.
Cuentan que fueron sublevadas mariposas de efímero vuelo nocturno y al verse tan bellas, desatadas, magníficas y dueñas de la noche posaron señoriales y distinguidas ante el lente de Luis Poirot.

Cuenta Poirot que una tarde Enrique Lihn les escribió unos versos para enaltecer su vuelo y ahí fraguaron una historia en blanco y negro coronada de versos...
Guardé los recortes de aquellas revistas durante largo tiempo entre cuadernos que fueron envejeciendo junto a mis recuerdos de adolescencia.

La vida me alejó de ellas, sin embargo el recuerdo de sus imágenes y la potencia de sus versos se me adhirieron a la piel...


"Tiene entonces la fugacidad del instante irrepetible
y la tosquedad de la belleza que asoma antes de la muerte.."

Algo así recuerdo...no puedo olvidarlo.

Hoy ha llegado hasta mis manos (por divinos sortilegios desde una princesa medieval que día a día me sorprende adivinándome los sueños) "El Maleficio de la Mariposa" de García Lorca y como una ráfaga de flashazos mágicos se me vinieron a la mente aquellos recuerdos de la "Efímera Vulgata"...y los seguí.

Hoy por hoy Internet y San Google son un aliado en estas búsquedas de recuerdos.

Y llego a su página casi temblorosa ante el maravilloso hallazgo de un recuerdo detenido.
Ya no me quedan imágenes en ningún cuaderno olvidado, se perdieron en el tiempo, entre los cambios de casa y el pasar de los años. Tampoco tuve jamás la suerte de leer el poema completo de Lihn que acompañaba la prodigiosa galería de imágenes de Poirot.
Sin embargo, el haber descubierto su sitio y el solo hecho de haber conocido el génesis de ésta historia mágica compensan el peso de todas mis búsquedas y la suma de todas mis nostalgias.


(Click al título para ver la galería completa "Efímera Vulgata")

lunes, marzo 24, 2008

¿Nos despertamos?

Nos despertamos de una vez por todas?
O volvemos en silencio señor castor?
Digo, en silencio así, sin avisarle mucho a nadie ... sin levantar ningún revuelo.
Digo, no es que no nos importen los amigos, sino que aveces es bueno el silencio... sirve, da más impulso a veces para partir con cautela un año que se nos viene cargadito.
Digo, para respirar y meditar, meditar después de un descanso rico y reparador, después de un verano largo y provechoso...

Porque es un agrado cuando comienza a correr la primera brisa del otoño y se comienza a sentir que las letras vuelven solitas así, sin llamarlas ni buscarlas siquiera.

Es cierto que no he tenido tantas ganas, que la pereza de gato flojo y las intensidades de la vida me la ganan, que de pronto no he querido dejar más que una leyenda abandonada en esta casa del castor, algo así como:
"Se me han acabado las letras, gracias por haberme acompañado"

Pero los amigos pasan de vez en cuando y le remecen a uno la flojera.
Y heme aquí hablando una vez más de nada y de todo, comprometiendo la vida en la palabra, descifrando cual Melquíades en estos pergaminos mi propio caminar en tanto voy escribienbdo, así. en foma simultánea...toda la historia reunida, toda la vida hecha letra y canto.

Despierto al Castor, descorro cortinas y dejo entrar vientos frescos para tirarme de lleno en este año de promesas en flor y caricias de luna pálida.
Sigo en ruta, sigo en ruta.