martes, enero 02, 2007

Amigos



Hacía rato que no lo pasaba tan bien en una celebración de año nuevo, hacía rato que la noche no se me hacía tan corta, que no veía salir el sol y las estrellas desaparecer, hacía rato que no veía a mis amigos juntos, a todos juntos ni nos abrazábamos con tanto cariño, ni les veía derramar lágrimas de alegría ni cantar a coro con las peores voces que jamás he oído.
Hacía rato que no veía a mis amigos con los ojos con los que los vi esa noche, la última noche del año, con los ojos de todo el cariño amontonado, recogido y tejido en más de veinte años de sincera amistad.
Por Dios, no había reparado en cuanto los quiero, en cuanto los he querido toda mi vida, cuánto han influido para que mi propia vida sea una vida felíz, cuánto nos hemos acompañado en tantos momentos malos y en tantos otros cientos de momentos felices.
Y me pareció verlos aquella noche como los veía en aquellos años en que nos conocimos, en los años de las peñas y de la pastoral, de las protestas y la música de los ochenta, al Iván con su guitarra, a la flaca con su jumper, al Toño con su look punky, al Chago y al Marcelo como hermanos mayores guiándonos en los años duros de nuestra juventud donde solo contábamos con nosotros mismos para salir adelante, para romper círculos, para lograr que cada una de nuestras vidas valiera la pena.
Y lo conseguimos solos, porque fuimos de esa generación que no pudo contar con sus padres para ello. Nos teníamos nada más que los unos a los otros y a pesar de los casamientos, las distancias y los nacimientos de los hijos seguimos estando juntos hasta el día de hoy.
Los vi algo viejos, han pasado los años y se nota, ellos entrados en canas y aún manteniéndose tan guapos como siempre lo han sido, con esa fuerza de hombres que la vida les ha dado, con la sonrisa serena, con el espíritu vivo, con las ganas de seguir adelante.
Ellas están hermosas, tal vez han ganado un par de kilos en estos años de familia y de vida acelerada pero siguen siendo las mismas niñas de antes, seduciendo el día a día, sosteniendo sus familias, adelantándose al futuro.
Son mi tesoro y cuánto me alegro de haberlo sabido cuidar y conservar hasta hoy.
Nunca me había querido convencer de la importancia de esta familia que escogemos, de la veracidad de la amistad sincera, del poder que un gran amigo conservado por años tiene sobre nuestras propias vidas.
Será un hermoso 2007, estoy segura de ello, porque he comenzado este año con el abrazo más hermoso que he cultivado por tantos años: el abrazo de mis amigos.

A Santiago e Isabel
Aquiles y Myriam
Marcelo y Adela
Gloria Y Lucho
Iván y Brenda
y Rodrigo

12 comentarios:

Coralya dijo...

Hemos comenzado este año con el pie derecho y eso me tiene realmente feliz. Ya te di tu abrazo pero ahora quiero desearte una felicidad enorme durante todo este año y que la paz y el amor del señor siempre te acompañen junto a toda tu familia. Un besote y todo mi cariño, FELIZ AÑO NUEVO querida Kiantei

Coralya

Anónimo dijo...

Kia

Me alegra saber que has compartido con tus amigos, quienes son algo así como una familia extendida aquellos que permanecen por años y años.

Que tal si le damos legitimidad a ese asunto,

me explico;

nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros hijos y abuelos influyen en nuestras vidas y nos acompañan en los caminos de la vida, y el amigo o la amiga también lo hace, por eso creo en darles legitimidad,

Sí darle legitimidad a nuestros amigos y amigas con papelitos legales y todo... ¿porqué?

por lo mismo que tu estás expresando y te cito:

¨Nunca me había querido convencer de la importancia de esta familia que escogemos, de la veracidad de la amistad sincera, del poder que un gran amigo conservado por años tiene sobre nuestras propias vidas.¨

Que tal si le damos legitimidad en nuestras vidas, ya que un verdadero amigo influye en nuestras vidas, y mucho de lo que alcanzamos a veces se lo debemos a un buen amigo.

Que Viva la legitimidad con papelitos y todo, al buen amigo u amiga.

M.

Claudia Castora dijo...

Te encuentro toda la razón, ya de algún modo entre nosotros hemos buscado la fórmula de crear vínculos más perpetuos, muchos somos padrinos y madrinas de nuestros hijos y en un caso tengo también el futuro de más de uno de ellos encargado a mis manos.
No había pensado lo del aspecto legal...es curioso e interesante puesto que es efectivamente una familia escogida.
Gracias por venir

Anónimo dijo...

Gracias amiga,

M.

Anónimo dijo...

Kia en mi blog te dejé éste comentario...

logosjuris dijo...
Kia

Ya lo leí, me encantó, me encantastes, me elevastes, y al final lo más que me gusta...me sonreistes.

Me visualicé un tanto sentada delante de ti, como una niña que escucha historias y cuentos... me remontastes a las ideas y a los sueños,

Eres genial.

M.

Anónimo dijo...

Fue un acto de justicia cerrar el año en compañía de estos amigos tan queridos. Ellos son, quizás, más que la propia familia, porque son los elegidos de la vida. Abrazos.

KromCvl dijo...

Que bkn que te diste cuenta de los amigos que tienes, el año se proyecta bien.


Saludos!!

Rantes dijo...

esos amigos que nos acompañan y hacen más liviana la carga, que grato tenerlos cerca......

un gran abrazo y los mejores deseos para este año...

un beso, chau

Anónimo dijo...

...yo tengo a mis pocos pero buenos amigos repartidos por todas partes (dentro del pais y fuera tambien), si tienes la suerte de tenerlos cerca, disfrutalos y no dejes que el estresante dia dia no te permita verlos como quizieras.....

Anónimo dijo...

No hay un tesoro mejor k el de contar con amigos.
Un abrazo.

mentecato dijo...

Los amigos son los hermosos hermanos que nacieron en otra familia.

Un abrazo.

Lucas M. Król dijo...

Hola no quiero romper este armoñioso blog...Bueno en realidad si quiero: Los malditos castores llegaron ebrios esta noche a casa, mientras los visitantes aguardaban su llegada esperando un cálido festim y una adorable conversación con aquellas criaturas. Como dije, por el contrario los castores llegaron demasiado ebrios con el corazón impregnado de ron y la paciencia razonando tequila por lo que su fama hospitalaria de nada esa noche servia, terminando por arruinar todo cuando Jorge el castor padre, jefe de familia, gordo y obstinado con borracheras sin risas sino más bien violentas, desenfundó la nueve milimetros que cargaba en su cintura acribillando a balazos a todos los visitantes. Pero por ser un animal, no significaba que no tuviera astucia ya que a la linda, pulcra y refinada visitante rubia no le disparo en el pecho ni en la cabeza como a los demas, le disparo en las rodillas para que no pudiera escapar y entre las anecdotas familiares de noches etilicas y sin sentido, quedo sumada la misteriosa historia de lo que papá castor esa noche en su habitación apunta de pistola obligo hacer a la habitante de ropa interior a lunares.