miércoles, julio 01, 2009

Heal the World


Hay que tener cuidado cuando se cree en la magia Michael, la gente suele no entenderlo.
La gente piensa que o se está loco o no se es de este mundo, la gente Michael no sabe convivir con los corazones demasiado mágicos. Todo se remite a cifras.
Tú eras especial.
¿Que como lo sé?
Yo intuyo, ya te he contado, puedo intuir por la mirada, el tono de la voz, el tipo de sonrisa, los actos que se tejen y destejen.
La intuición no es un don amigo mio, es un ejercicio de práctica.
Si yo le digo al mundo que creo en castores mágicos, que me habitan las hadas, que el mundo de los sueños no es el que tenemos en nuestras mentes y corazones sino este mismo, el que fabricamos día a día con las propias manos debo salir cada cierto tiempo a aclarar que de verdad es un síntoma de cordura esta magia que me reina y que tengo clarísimos los límites de la fantasía y la realidad.
¿Y para qué? para no tener problemas, supongo, para dejar en paz a algunas personas, quizá.
Pero tú nunca aclaraste nada y quizá hasta fue mejor así.
Pocos entendieron que de verdad reinabas en un país de leyendas donde siempre fuiste un ángel sin muerte, un niño eterno.
Tú cantabas y tu canto fue la banda sonora de mi vida entera.
Tú cantabas y la magia de tu voz reinaba en tu mundo y en el mío.
¿Recuerdas aquel tiempo?
Ya has vuelto a tu planeta y yo desde mis bosques te sigo mirando y extrañándote.
Y ninguna persona mayor lo podrá comprender Nunca Jamás.
.

2 comentarios:

Claudia Castora dijo...

Tamos solo.
Te adoro Michael.
Y nunca te voy a olvidar.

Claudia Castora dijo...

Y lo escribí porque no tengo ni un solo post con cero comentarios.
Y éste no iba a ser el primero.